De acuerdo a la Epístola de Pablo a los Romanos y a la Segunda Epístola de Pablo a los Corintios, ¿quiénes comparecerán ante el tribunal de Dios?
Sólo aquellos que rehusan arrepentirse y convertirse.
Sólo aquellos cuya conversión no es genuina y sincera.
Sólo aquellos cuya conversion es genuina y sincera.
Todos los seres humanos.
Antes de estudiar sobre el juicio final, debemos comprender la profecía registrada en el libro de Daniel : «Hasta tardes y mañanas; luego el será .» Este período profético comenzó en el año 457 y terminó en el año 1844, año en el cual comenzó el juicio de Dios.
El libro de Levítico describe un servicio que se realizaba anualmente, durante el cual los pecados de quienes se habían arrepentido sinceramente eran completamente borrados: era la purificación del santuario. Este servicio, sombra de la primera parte del juicio de Dios, ocurría...
... en el Día de la Expiación.
... en la Fiesta de las Trompetas.
... en el Día de la Pascua.
... en la Fiesta de los Panes Sin Levadura.
Así como el santuario terrenal debía ser purificado, también el celestial. En su Primera Epístola, Pedro explica el significado de la purificación del santuario celestial: «Porque es tiempo de que el comience por la de Dios. Y si primero comienza por , ¿cómo será el fin de aquellos que no obedecen al evangelio de Dios?» Aun así, muchos dicen estar convertidos y seguir a Cristo, pero esta parte del juicio identificará a aquellos cuya conversión es genuina.
En el libro de Éxodo, Dios habló a Moisés y claramente le declaró lo que le sucedería a los creyentes cuya conversión no era genuina y sincera: «¡Al que ha pecado contra Mí,...»
«... a ése lo perdonaré en el día del juicio final!»
«... a ése lo borraré de Mi libro!»
«... a ése lo castigaré con sufrimientos eternos!»
«... a ése lo enseñaré Mi Palabra de verdad!»
Varios libros serán consultados en el juicio. El profeta Malaquías menciona uno de estos libros. En este libro se hallan escritas todas las buenas obras de los hijos de Dios, que justificará el premio que cada uno recibirá en la tierra nueva. ¿Qué libro es este?
El libro de la vida.
El libro de cuentas.
El libro de memorias.
El libro de las recompensas.
Desafortunadamente, como lo dice el profeta Jeremías, también hay libros que contienen un registro de las malas obras de todos aquellos que rechazaron la oferta de salvación en Jesús: «Aunque te con lejía y amontones jabón sobre ti, la mancha de tu delante de Mí.» Estos libros justificarán el castigo, en el fin de los tiempos, de cada una de las personas que rehusaron arrepentirse.
En la Primera Epístola de Pablo a los Corintios se describe la seguna parte del juicio de Dios: «¿O no sabéis que los han de juzgar al ?» De hecho, un período de 1000 años ocurrirá después de la segunda venida de Jesús. Durante ese período, el pueblo de Dios estudiará los casos individuales de los impíos, sus responsabilidades, su grado de culpabilidad de acuerdo con sus pensamientos, palabras y hechos.
De acuerdo con la Epístola de Pablo a los Romanos, y con la Epístola de Santiago, ¿cuál será la base del juicio de Dios?
Los valores morales de cada persona.
Los valores culturales de cada persona.
Los valores religiosos de cada persona.
La ley de Dios.
Finalmente, la Epístola a los Hebreos trae buenas noticias para todos aquellos que fielmente siguen al Salvador Jesús: «Porque no entró en el santuario hecho por los hombres, figura del verdadero, sino en el cielo mismo, para ahora por ante Dios.»