1. La Biblia nos habla de dos leyes, diferentes la una de la otra. La primera es mencionada en el libro de Isaías: «Han desechado la ley de de los Ejércitos.» Y la segunda ley es mencionada en los Hechos de los Apóstoles: «Pero algunos de la secta de los fariseos que habían creído se levantaron diciendo: “Es necesario circuncidarlos y mandarles que guarden la ley de .”»

2. Los libros de Éxodo y Deuteronomio nos dicen quién escribió cada una de las dos leyes. De la siguiente lista, marque todas las respuestas correctas:
   La ley ceremonial fue escrita por Dios.
   La ley ceremonial fue escrita por Moisés.
   La ley moral fue escrita por Dios.
   La ley moral fue escrita por Moisés.

3. Los libros de Éxodo y Deuteronomio también especifican el lugar donde era puesta cada una de las dos leyes. De la siguiente lista, marque todas las respuestas correctas:
   La ley ceremonial era puesta junto al arca del pacto.
   La ley ceremonial era puesta dentro del arca del pacto.
   La ley moral era puesta junto al arca del pacto.
   La ley moral era puesta dentro del arca del pacto.

4. El sacrificio expiatorio de Jesús en la cruz definitivamente ha abolido una de las dos leyes, y en la Epístola de Pablo a los Efesios se especifica cuál de ella fue: «Porque [Cristo] es nuestra paz, quien de ambos nos hizo uno. El derribó en Su la barrera de división, es decir, la hostilidad; y abolió la ley de los mandamientos formulados en .» Cristo, al morir, se convirtió en el Cordero de Dios que fue sacrificado por los pecados del mundo, poniendo fin a todo el sistema de sacrificios del santuario terrenal.

5. Por otra parte, el Evangelio según Mateo nos dice cuál fue la actitud de Jesús frente a la ley moral, los Diez Mandamientos. Jesús dijo que Él había venido para...
   ... destruir la ley.
   ... cambiar la ley.
   ... añadir las tradiciones de los hombres a la ley.
   ... cumplir la ley.

6. Varias son las diferencias entre la ley ceremonial y la ley moral. Podemos ver una de estas diferencias al comparar la Epístola a los Hebreos y la Epístola de Pablo a los Romanos. De hecho, en el primer libro se nos dice sobre la ley ceremonial: «Esto es aun más evidente si otro sacerdote se levanta a la semejanza de Melquisedec, quien no ha sido constituido conforme al mandamiento de la ley acerca del linaje .» Y el segundo libro habla de la ley moral de esta manera: «Porque sabemos que la ley es .»

7. Algunos pasajes de las Escrituras (entre ellos, la Epístola de Pablo a los Gálatas y la Primera Epístola de Juan) son un verdadero jeroglífico para aquellos que no comprenden la diferencia entre la ley ceremonial y la ley moral. Sin embargo, la enseñanza de la Biblia es clara, tajante y lógica. De las siguientes declaraciones, marque todas las respuestas correctas:
   El pecado es infracción de la ley moral.
   El pecado es infracción de la ley ceremonial.
   Por causa de las transgresiones fue dada la ley moral.
   Por causa de las transgresiones fue dada la ley ceremonial.

8. La Epístola de Pablo a los Colosenses y la Epístola de Santiago también nos enseñan la diferencia entre la ley ceremonial y la ley moral. De hecho, el primer libro dice lo siguiente sobre la ley ceremonial: «[Cristo] anuló el acta que había nosotros, que por sus decretos nos era .» En la otra mano, el segundo libro nos dice lo siguiente sobre la ley moral: «Así hablad y así actuad, como quienes están a punto de ser juzgados por la ley de la .»

9. Trazando una linea paralela entre los Hechos de los Apóstoles y la Primera Epístola de Juan, descubrimos otra diferencia obvia entre la ley moral y la ley ceremonial. De las siguientes declaraciones, marque todas las respuestas correctas:
   La ley moral es descrita como un yugo pesado.
   La ley ceremonial es descrita como un yugo pesado.
   Por el contrario, la ley moral no es una carga.
   Por el contrario, la ley ceremonial no es una carga.

10. El mejor resumen de la lección sobre las dos leyes puede encontrarse en la Primera Epístola de Pablo a los Corintios: «La circuncisión no es , y la incircuncisión no es ; más bien, lo que vale es guardar los de Dios.» Así que, como cristianos, no tenemos que guardar ya más la ley ceremonial, la cual fue abolida al morir Jesús en la cruz. Sin embargo, debemos guardar los Mandamientos de Dios, los cuales describen las obligaciones de cada persona hacia Dios y hacia su prójimo.

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